Soñar con un mundo mejor implica que, al despertar, debemos ponernos manos a la obra en su construcción.
Si no haces nada, nada tendrás.
¡Hagamos algo ya!
Y no esperes a que los cambios vengan desde arriba.
Los cambios serán desde abajo, con tu trabajo y el mío, o no será.
Nunca lo ha sido, ¿por qué iba a serlo ahora?
¿Eres tan ingenuo como para creer en los políticos y votarlos?
¿No te has dado cuenta que los gobiernos cambian pero los problemas continúan?
¿Cuánto tiempo tiene que pasar para que despiertes y decidas hacer algo?
Si quieres un futuro no lo esperes. Vete tú a por él. ¡Créalo!
Y si no sabes cómo lee el capítulo 4 de las soluciones titulado "Donde podemos estar".
Cualquiera de ellas seguro que es mejor que el capitalismo-neoliberalismo que nos ha tocado vivir.
AMIGO.
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